Para empezar, hablamos del bus. Esos buses grandes, que utilizan en El Norte para llevar los niños al colegio. Acá, no se dice bus sino ‘el chuzón o chusón’. Al contrario de los buses amarillos de sus vecinos, los buses salvadoreños están decorados con muchos colores, pinturas y otras ‘babosadas’. Tienen mucho carácter y personalidades. Todos tienen nombres propios, lugares que sirven, números de ruta y slogan o referencias a dios. Por ejemplo, me recuerdo de unos nombres como: ‘Wicked Sensation’, ‘Chechito Express’ y ‘Maritza Esmeralda’. Cuando uno se sube al bus, tiene que pagar ‘una cora’ para el pasaje. Si uno no tiene suficiente dinero para pagar, puede preguntar que un amigo le ayuda: ‘regálame un tostón para el pasaje vos’.
Después, hay los microbuses, también llamados ‘coster, coaster, coster loco’. Esos buses, más pequeños que los grandes, quizás con capacidad de sentar catorce personas pero siempre llenísimo con quizás treinta o cuarenta personas bien pegadas. Esa si es la experiencia a la pura Salvadoreña. Una de las rutas más famosas que he tomado era la 42. En efecto, eso fue una de las primeras preguntas cada vez que encontré alguien nuevo durante mi primer viaje allá: ¿Ya fuiste en un micro de la 42? Esos microbuses funcionan usualmente con dos personas: un conductor llamado ‘microbusero’ y un ayudante llamado ‘cobrador’ (que atrae a los clientes y ayuda el conductor para manejar). El cobrador por ejemplo grita ‘visa visa’ o ‘avisa avisa’ para parar el micro. Después grita expresiones para atraer a los clientes como: ‘sube sube sube’, ‘a Tecla vamos, a Tecla vamos’ (con connotación sexual) ‘suba suba que hay asientos’ (cuando no hay asientos, de tan lleno) o una que siempre me hace sonreír cuando la escucho: ‘tópense que andan ropa, nada les va a pasar’. Cuando se va otra vez, el cobrador ayuda el conductor para meterse en el trafico gritando: ‘metete metete’ o ‘métele la pata’
El microbusero conduce muy rápido y existen un montón de expresiones para hablar de la velocidad de los microbuseros y también de conductores en general: ‘en dos patadas’, ‘se fue hecho una mierda’, ‘se fue en guinda’, ‘va hecho un pedo’, ‘va bien arriado’, ‘va sunbado’, ‘va hecho una verga’.
La mayoría de los microbuses o costers tienen música cumbia también, siempre bien fuerte. Unos aún tienen luces ‘neon’ como si era disco móvil. Me recuerdo de uno donde los asientos eran de cuero falso, luces azules purpuras y música moderna como si andábamos en Envi.
Para terminar recuérdense de no ‘hablar carburo’ y de tener cuidado manejando: ‘si van a manejar no tomen…si van a tomar que me invitan’.